Si te encuentras en el Camino de Santiago, concretamente en el Camino de Finisterre y Muxía, Olveiroa es uno de esos pueblos que no deberías pasar por alto. Este pequeño rincón gallego es mucho más que un lugar de paso; su encanto reside en su tranquilidad, sus paisajes y su historia.

A lo largo de sus calles encontrarás monumentos tradicionales, paisajes que parecen sacados de postales y una gastronomía que hará que quieras quedarte un poco más. Y, como hemos adelantado, su ubicación lo convierte en un punto estratégico para quienes siguen la ruta a Muxía o Finisterre.

 

Olveiroa y su relación con el Camino de Santiago

Olveiroa es una parada clave para muchos peregrinos que eligen recorrer el Camino de Santiago hacia Muxía o Finisterre. Este pequeño pueblo gallego ha estado ligado al Camino desde hace siglos, ofreciendo un refugio a quienes buscan descansar tras largas jornadas. 

Aunque su tamaño es modesto, su papel en esta peregrinación es significativa, ya que conecta a los peregrinos con la espiritualidad y la tradición que envuelven esta ruta milenaria.

Además, es un lugar donde puedes apreciar construcciones típicas de la arquitectura gallega, como hórreos y casas de piedra. Para los que buscan una experiencia más organizada, contar con una empresa de viajes para el camino de Santiago de Compostela puede facilitar la logística: desde la planificación de las etapas hasta el alojamiento.

 

Olveiroa y las diferentes rutas del Camino de Santiago

Olveiroa es un punto de encuentro importante para varios caminos que convergen en la etapa final hacia la costa gallega. Si decides hacer el Camino Primitivo a pie, que parte de Oviedo, es posible que termines tu travesía en esta aldea, especialmente si continúas hacia Finisterre o Muxía. Su ubicación estratégica lo convierte en un lugar ideal para descansar antes de seguir explorando.

Existen varias rutas que pasan por Olveiroa o lo tienen como referencia. Algunas de las más destacadas son:

 

Un recorrido por sus paisajes naturales

Olveiroa está rodeado de un entorno natural que sorprende por su belleza y diversidad. Al caminar por sus alrededores, te encuentras con paisajes que invitan a detenerte y disfrutar de la tranquilidad del lugar. Un punto destacado es el Embalse da Fervenza, una gran extensión de agua que refleja la naturaleza gallega en su estado más puro.

Otra maravilla natural cercana es la Cascada del Ézaro, un espectáculo único en Galicia. Aquí, el río Xallas se desploma directamente al mar, algo poco común en Europa. Este lugar, además de su belleza, tiene un mirador desde donde puedes observar toda la costa.

El terreno que rodea Olveiroa es ideal para caminar entre colinas y valles, con vistas panorámicas que hacen que cada tramo del camino tenga algo especial. También es un buen lugar para detenerse si quieres disfrutar de la calma y observar la vegetación local.

 

La iglesia de Santiago de Olveiroa

La Iglesia de Santiago de Olveiroa es uno de los puntos históricos más destacados del pequeño pueblo y está en el cementerio. 

Esta iglesia, que data del siglo XII, ha sido testigo de siglos de peregrinación. De estilo románico, su arquitectura sencilla refleja la espiritualidad y la humildad del entorno rural gallego. Si decides visitarla, notarás que, aunque es pequeña, su relevancia histórica la convierte en un lugar imprescindible para los peregrinos.

A pesar de las restauraciones, ha mantenido su esencia original. En su interior, encontrarás un ambiente acogedor, donde muchos peregrinos se detienen para descansar y reflexionar durante su viaje hacia Compostela. El retablo principal, aunque modesto, conserva detalles artísticos que hablan de su antigüedad.

 

Los hórreos centenarios

Los hórreos centenarios de Olveiroa son un auténtico testimonio de la vida rural gallega. Estas construcciones de piedra y madera, que se utilizaban para almacenar grano, destacan no solo por su funcionalidad, sino también por su belleza arquitectónica. Al caminar por el pueblo, verás cómo estos hórreos siguen en pie, conservando la tradición agrícola que ha marcado a Galicia durante siglos.

La antigüedad de muchos de ellos, algunos con más de cien años, los convierte en piezas de interés histórico. Su estructura elevada sobre pilares les protegía de la humedad y de los animales, lo que permitía conservar los alimentos en perfecto estado. Hoy, aunque su uso original ha disminuido, siguen siendo parte esencial del paisaje rural y de la identidad de la región.

Al llegar aquí, te sorprenderá la cantidad de hórreos que aún se mantienen. Además, están distribuidos en diversos puntos del pueblo, permitiéndote ver de cerca su diseño y apreciar la artesanía que hay detrás de cada uno.

 

El puente de Olveiroa

El puente de Olveiroa es uno de los puntos clave en tu recorrido por este encantador pueblo. Esta antigua construcción, que cruza el río Xallas, ha sido testigo del paso de peregrinos durante siglos. Su arquitectura robusta, hecha de piedra, refleja la tradición gallega y su habilidad para adaptar el entorno natural a las necesidades del camino.

Cuando te acerques, notarás cómo se integra perfectamente en el paisaje. Su diseño sencillo, pero eficaz, ha permitido su conservación a lo largo del tiempo. A medida que lo cruzas, sentirás la tranquilidad del lugar y la conexión con los muchos caminantes que han pasado por aquí antes que tú.

Este puente no solo es un símbolo de la historia local, sino también una referencia importante en la ruta hacia Santiago. Forma parte del legado que el Camino de Santiago ha dejado en pueblos como Olveiroa, donde cada detalle, como este puente, tiene una relevancia única para los peregrinos.

Además, el entorno que lo rodea, con sus verdes colinas y el río, ofrece un respiro visual y te invita a detenerte un momento para disfrutar del paisaje. Sin duda, este puente es una parada obligada.