Por qué hacer el Camino de Santiago

La pregunta de porqué hacer el Camino de Santiago, ha sido cuestionada y respondida al mismo tiempo a lo largo de los 1200 años aproximadamente de historia del Camino de Santiago.

Millones de personas de todo el mundo, han recorrido la infinidad de Itinerarios del camino de Santiago que confluyen en Santiago de Compostela, confirmándose como un fenómeno sociológico de primer orden, no sólo para los cristianos, sino para toda persona que vaya “buscando algo”

PEREGRINOS, TURISTAS O CAMINANTES A SANTIAGO

Existen en el Camino “peregrinos”, en el sentido estricto de la palabra o simplemente “caminantes a Santiago”, pero creemos que no hay que caer el rigor absoluto de las palabras.

Cada persona está haciendo “su propio Camino” y quién somos nosotros si afirmásemos con rotundidad “que hay que hacer el Camino de Santiago de una u otra manera”, pues seguro que encontramos motivos suficientes para desvirtuar, con hechos, esta afirmación, como decían en la Edad Media – mi secreto para mí -, pues pensar que todas las personas realizan el Camino, por motivos espirituales, es olvidar lo que todo hombre/mujer es y será siempre.

De hecho, si nos ceñimos al significado de las diferentes palabras con las que se suele definir a las personas que realizan el Camino, según la Real Academia de la Lengua Española, podemos ver que todas son válidas en la ruta:

Peregrino: “ Persona que anda por tierras extrañas” o “ Persona que por devoción o por voto va a visitar un santuario, especialmente si lleva bordón y la esclavina”

Turista: “Persona que hace turismo, por placer”.

Caminante: “Persona que camina”

HACER EL CAMINO DE SANTIAGO «ENGANCHA»

Quizás, uno de los principales motivos por lo que “engancha”, sea que te ofrece lo que tú vayas buscando, e incluso, alguna de las cosas que ni pensabas encontrarte en él, pues en tu caminar te dará tiempo para pensar, conversar con otros peregrinos, conocer gente, poner en orden tus ideas o, simplemente, no pretender nada en especial.

Lo que si es cierto, en la mayoría de los casos, que una vez llegamos a Santiago de Compostela en la Plaza del Obradoiro, y teniendo la Catedral como testigo, te aflorarán “múltiples sensaciones personales”, sea cuál sea tu motivación, pues “A veces, la búsqueda importa más que lo que encuentres en ella”, o “ Es más importante el Camino que el destino”.

Realices una ruta u otra, encontrarás un sinfín de argumentos religiosos históricos, culturales, arquitectónicos, etc., que forjaron la creación de Europa, pues el Camino de Santiago fue el crisol de todos los pueblos y gentes que han peregrinado y siguen haciéndolo, a lo largo del Camino dejando su impronta en él. Por eso el Camino de Santiago es considerado como la Calle Mayor de Europa.

MOTIVACIONES PARA HACER EL CAMINO DE SANTIAGO

Hay tantos motivos diferentes para hacer el Camino de Santiago como personas lo realizan, bien sean de índole deportiva, cultural, gastronómica, turística, o simplemente por curiosidad, siendo o no creyente. Lo cierto es que «algo” tendrá este Camino cuando multitud de personas que, una vez lo realizan por primera vez, repiten año tras año esta fascinante experiencia.

ESTADÍSTICAS DE PEREGRINOS

En todo el año 2019 en la Oficina de Peregrinos de Santiago de Compostela se recibieron 347.578 peregrinos frente a los 327.378  peregrinos del año 2018, lo que 
supone un incremento de 20.200 personas respecto al año anterior. Según sus manifestaciones, se reflejan las diferentes motivaciones por las que realizaron su Camino:

Religiosos y otros: 169.314
Religiosos: 140.110
No religiosos: 38.154

En función de tus motivaciones para hacer el Camino de Santiago, al llegar a Santiago de Compostela te entregarán el certificado de La Compostela si son motivaciones religiosas u otro certificado similar si es por otras motivos. Nadie se quedará sin el reconocimiento del Camino realizado!

Ampliando estas motivaciones, se podrían sintetizar en: Visitar la Tumba del Apóstol – Conocerse a sí mismo – Cambio de aires – Cultura – Gastronomía – Deporte – Conocer gente – Huir de la rutina – Hacer amigos. Cada vez son más los peregrinos de estas estadísticas que contratan el Camino de Santiago con viajes organizados mediante empresas especializadas, como Viajes Mundiplus, que proveemos de servicios de asistencia, atención telefónica, reserva en alojamientos con encanto, tras de equipajes, etc.

EXPERIENCIA PERSONAL

No es sólo un recorrido turístico en sentido estricto, pues en él se ven expresadas un sinfín de expresiones de tipo religioso que configuran la esencia religiosa de la fe cristiana, y que, con independencia de la motivación personal, suele resultar una experiencia personal sumamente gratificante, muy diferentes a otras.

Es muy probable que todos conozcáis a alguna persona que ya lo ha realizado y os haya contado sus vivencias, impresiones y ya tengáis algún conocimiento del mismo, o que en algún momento habéis pensado en hacerlo y es algo que tenéis “pendiente». Hay que vivirlo en primera persona, porque la realidad supera con creces la leyenda del Camino.

Igualmente, quizás hayamos coincidido en alguna localidad, mientras estabais de visita, con algún peregrino y os habréis preguntado, al verlos cansados o sudorosos ¿por qué lo harán, si merece la pena el esfuerzo y si podré hacerlo yo? y sólo hay una respuesta posible, ¡¡SI!! …. depende de vosotros averiguarlo.

Millones de personas, a lo largo de su historia, lo han realizado y, cada uno con su “mochila” de problemas, dudas, carencias, u otros motivos y, al igual que todos, han finalizado su “pequeña aventura”, cada uno con su mayor o menor esfuerzo y alguna que otra rozadura o ampolla.

Aconsejamos no tener prisa en finalizar las etapas para llegar muy pronto a final de las mismas, pues habrá que recordar que lo fundamental del Camino está en sí mismo, y no en llegar al final.

HAZ TU PROPIO CAMINO

Creemos aconsejable que cada persona, aunque vaya con un grupo de personas numeroso, hagan su “propio Camino”, a su ritmo, no al de los demás. Otras personas deciden hacer el Camino de Santiago en solitario por decisión propia o por falta de conocidos que cuadren las mismas fechas del viaje. Esto no sería un problema ya que luego se unen a peregrinos en ruta, o en los propios alojamientos; ya que esto es precisamente el Camino de Santiago, compartir la experiencia con gentes de todas partes del mundo.

Aunque cada uno va a decidir, en todo momento, como quiere afrontar su Camino, os dará la impresión que estáis envueltos en un ambiente “especial”, en el que estáis rodeados de un grupo numeroso de personas, procedentes de todas las partes del mundo, con las mismas o parecidas inquietudes, metas, objetivos y con similares necesidades, por lo que se crea un clima que favorece el altruismo, compañerismo, la actitud abierta y generosa hacía vuestros compañeros de viaje, aunque no los conozcáis, de momento… pero que coincidiréis con muchos de ellos a lo largo de vuestro Camino.

Probablemente, una vez llevéis unos días caminando, hayáis descubierto esos pequeños detalles que te hacen sentir feliz o que te encuentras bien con lo que estas haciendo, sin echar de menos aquellas cosas cotidianas a las que antes le dabas una importancia excesiva, como por ejemplo que “ no tengo cobertura en el móvil”.

Lo que antes, para muchos, podría ser como una «excursión», ahora puede ser un viaje al interior de uno mismo, en que lo importante es el día a día o “Carpe Diem”, como diría el poeta Horacio, que traducido sería: «Aprovecha el día de hoy; confía lo menos posible en el mañana”. Tendréis tiempo de escuchar el silencio, oír el correr del agua de los riachuelos, cosas sencillas a la que no estaremos muy acostumbrados en nuestro quehacer diario.

A mi juicio, esto no significa que el Camino nos cambie en nuestras convicciones personales, pero puede que nos ratifiquemos en ellas o, por el contrario, simplemente, como señalábamos en párrafos anteriores, he sentido que mientras estaba haciendo el Camino, “me he encontrado feliz”, y con eso “misión cumplida”, tan sencillo como eso.

BUENAS SENSACIONES Y ENERGÍAS POSITIVAS («PURA VIDA»)