El Camino Portugués de la Costa es de los trazados más bonitos. También es conocido como El Camino Monacal en su paso por Galicia. Es el recorrido que cruza el litoral atlántico, teniendo como punto de partida la ciudad de Oporto.

Además de la importancia histórica, el Camino Portugués de la Costa también destaca por su belleza paisajística. Por supuesto, también encontrarás joyas arquitectónicas que iremos encontrando a medida que se recorren estos más de 300 km que separan Porto de Santiago de Compostela.

Los 5 monumentos más importantes del Camino Portugués por la Costa

¿Estás planificando hacer el Camino de Santiago con viajes organizados en el caso del tramo Portugués de la Costa?

Entonces, debes saber que la popularidad de esta ruta crece de manera exponencial. Puedes encontrar peregrinos sin importar la época del año. Desde el punto de vista físico es de las menos exigentes. Además, suele tener clima templado en su mayoría. Todo, sin dejar de lado su riqueza arquitectónica y paisajística.

Posiblemente no sea tan popular como el Camino de Santiago desde Sarria, pero te podemos asegurar que hay muchos puntos de interés. Aquí te dejamos los cinco monumentos más resaltantes que podrás disfrutar en este recorrido:

Catedral de la Sé de Oporto

Al ser el punto de partida y la segunda ciudad más importante de Portugal, Oporto tiene un montón de atractivos para disfrutar. De hecho, fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Aunque son muchos los lugares para ver, sin duda destaca la Catedral de la Sé. Además, de ser el edificio religioso de mayor importancia, también tiene una interesante historia.

Su construcción empezó en pleno siglo XII, en uno de los puntos más altos de la ciudad, en el barrio de Batalha, junto a las antiguas murallas. Por eso, esta edificación también tiene aspecto de fortaleza.

La mayor parte de su fachada corresponde al estilo barroco. No obstante, también tiene detalles románicos y góticos, en parte por las diferentes reformas y restauraciones que ha sufrido con el tiempo. Como visita obligatoria, destaca su precioso claustro, con miles de azulejos que en conjunto narran la historia de las Metamorfosis de Ovidio.

Fortaleza de Nossa Senhora da Conceição en Póvoa de Varzim

Póvoa de Varzim es una preciosa e histórica población cuyos orígenes se remontan a la época prehistórica. En su período romano era conocida como Villa Euracina y se desarrollaba más hacia el interior. Sin embargo, en 1308 decidieron trasladarla a la zona de la costa, donde la podemos visitar en la actualidad.

Desde sus orígenes, sus actividades comerciales siempre han estado ligadas al mar, especialmente la pesca. De hecho, su puerto fue uno de los más influyentes entre los siglos XVI y XVIII.

Con intención de proteger el puerto de los ataques e invasiones piratas, se construyó en este punto un pequeño fortín conocido como Forte de Torreão. Un siglo más tarde fue necesario reconstruirlo. En 1701 se empezó la obra, aunque por falta de presupuesto se paralizó en 1704.

No fue hasta 1738 cuando se retoman las obras que finalizaron en 1740. Desde entonces y por abandono oficial, sus instalaciones se usaron para diferentes actividades, incluyendo corridas de toros y espectáculos de acróbatas.

Desde 1960 hace parte de la lista de Inmuebles de Interés Público de la ciudad, siendo restaurada prácticamente en su totalidad en 2015.

Puente románico de La Ramallosa

Santa Cristina da Ramallosa es el nombre oficial de esta población que hace parte de la provincia de Pontevedra, en Galicia. Sin lugar a dudas, el principal monumento de esta localidad es el Puente de La Ramallosa. Su origen se remonta hasta la época románica, específicamente la primera mitad del siglo XIII.

Fue construido en el siglo XIII, con dos arcos de medio punto, algunos ojivales y otros apuntados de forma muy suave. Cuenta además con diez ojos y un precioso doble sistema de tajamares. El objetivo era poder sostener la fuerza del río y la marea en general. Destaca en el centro una cruz que tiene la imagen de San Telmo quien es patrón de los navegantes.

Otro de los puntos más llamativos es el retablo que está sobre una mesa maciza hecha de piedra. Aquí hay tres ánimas y según la leyenda, aquí se realizaban ritos de fecundidad.

Este puente hacía parte de un antiguo camino medieval, conocido como Per Loca Maritima. Comunicaba con otras poblaciones costeras y algunos enclaves como el Monasterio de Oia.

Iglesia de Santa María de Reboreda en Redondela

Redondela, en la provincia de Pontevedra, es una preciosa y muy acogedora población donde los días transcurren en calma, rodeados de los más bonitos paisajes naturales. Justo aquí, en Santo Paio de Abaixo, se encuentra la Iglesia de Santa María de Reboreda, cuya construcción se remonta a 1736.

Cuenta con una planta de cruz latina y una bonita sacristía que está adosada. Además, como elemento llamativo está el pasillo elevado que le permite comunicarse con el Pazo de Reboreda. Está es una construcción vecina y que sirvió como capilla privada en el pasado.

En esta casa vecina podemos ver además dos escudos: El de la familia Araujo y Puga y el de la familia Prego de Montaos. Estos últimos tuvieron lazos con la familia Mondragón, los encargados de la construcción de esta capilla.

El atrio de la iglesia está adornado con un cruceiro, cuya construcción data de 1770. Además, permite disfrutar de unas increíbles vistas hacia Redondela.

Castillo de San Sebastián en Vigo

Estamos llegando al punto final del Camino, Santiago de Compostela. No obstante, antes debemos pasar por una preciosa localidad: Vigo. Con un poderoso pasado pescador y cargado de encantos, son muchas las cosas que podrás ver en este lugar. Sin duda, el Castro o Castillo de San Sebastián es una de esas joyas que debes descubrir.

En este punto residieron los primeros habitantes de la ciudad de Vigo, allá, en el siglo III a.C. Está situado en el corazón de la localidad. Además, desde este punto, verás vistas hacia la zona de la ría, las islas y el centro.

La construcción actual se remonta a 1656. La intención era de defender la ciudad frente a los constantes ataques de las tropas enemigas durante la guerra entre España y Portugal. Dentro de este recinto amurallado podrás encontrar un precioso jardín con estanque incluido.