Aunque menos conocida, la Ruta de la Lana es una de las rutas más históricas del Camino de Santiago. Además de su conexión religiosa, era una vía comercial que unía dos regiones alejadas dentro de la península. Desde tiempos medievales, esta ruta ha sido vital para el comercio de la lana, un recurso esencial que dio nombre a este camino.

En este artículo, exploraremos sus orígenes y la evolución, descubriendo cómo ha transformado y enriquecido las regiones por las que pasa. Hablaremos sobre su importancia histórica y cultural, así como su relevancia actual en el contexto del turismo y el peregrinaje moderno. 

¿Te gustaría conocer más sobre esta ruta llena de historia y tradiciones? Desde Mundiplus, tu agencia de viajes organizados del Camino de Santiago de Compostela, te contamos todo acerca de este trayecto, uno de los más largos hasta llegar a la Catedral.

 

Orígenes de la Ruta de la Lana

Como te hemos dicho, esta es una de las rutas jacobeas menos conocidas, pero no por ello menos importante. Conecta Levante (Valencia o Alicante) y Castilla con el Camino de Santiago, cruzando paisajes diversos y ricos en historia. Para empezar, profundizaremos en los aspectos históricos que dieron forma a esta ruta singular.

 

Contexto histórico de la Ruta de la Lana

En la Edad Media, la economía europea estaba profundamente influenciada por la producción y comercio de la lana. España, y en particular Castilla, era una de las principales regiones productoras de lana de alta calidad. No solo era un bien de consumo, sino también un producto de exportación vital, lo que fomentó la creación de rutas comerciales específicas.

La conexión entre la lana y el Camino de Santiago se estableció debido a la necesidad de transportar este valioso recurso hacia los principales centros de comercio europeos. Los comerciantes y peregrinos a menudo utilizaban las mismas rutas, lo que permitió la difusión de productos, ideas y cultura. 

Este camino servía como un eje comercial que conectaba a los productores con los mercados, y también como un camino espiritual para los peregrinos hacia Santiago de Compostela.

 

Primeros registros y documentación histórica

Los primeros registros están en documentos y crónicas de la Edad Media, donde se menciona la existencia de caminos utilizados para el transporte de lana desde Castilla hasta el norte de España. Estos documentos detallan no solo las rutas, sino también los pueblos y ciudades clave en el comercio de la lana.

Las crónicas históricas y archivos municipales conservan testimonios de la importancia de esta ruta. Por ejemplo, en el siglo XIII, el Concejo de Cuenca ya mencionaba la relevancia de las rutas de la lana en su desarrollo económico. Además, registros de la Mesta, una poderosa organización de ganaderos, documentan el tránsito de lana y la utilización de rutas específicas.

 

Desarrollo y Evolución de la Ruta de la Lana

Con los años, experimentó un desarrollo y evolución significativos a lo largo de los siglos. Desde su consolidación en la Edad Media hasta sus transformaciones en épocas más recientes, ha sido testigo de innumerables cambios económicos y sociales. Exploraremos cómo estos cambios han moldeado la ruta en diferentes periodos históricos.

 

Expansión y consolidación durante la Edad Media

Como te hemos dicho, la creciente demanda de lana española de alta calidad en mercados europeos, especialmente en Flandes e Italia, impulsó el desarrollo de esta ruta. Además, el apoyo de la Corona y la organización de la Mesta facilitaron la expansión de las actividades ganaderas y comerciales.

Las rutas comerciales que formaban la Ruta de la Lana conectaban importantes centros de producción en Castilla con puertos y ciudades clave, como Cuenca, Burgos y Medina del Campo. Estos puntos de encuentro eran vitales no solo para el comercio, sino también para el intercambio cultural y social.

 

Transformaciones en la Edad Moderna y Contemporánea

En la Edad Moderna, experimentó importantes transformaciones debido a cambios en el comercio y la industria. La aparición de nuevas rutas marítimas y el auge de otras industrias redujeron la dependencia del comercio de lana. Sin embargo, la ruta continuó siendo utilizada, adaptándose a las nuevas circunstancias económicas.

El impacto de las guerras y eventos históricos (Guerra de Sucesión Española y Guerras Napoleónicas), también afectaron la Ruta de la Lana. Estos conflictos alteraron las dinámicas comerciales y provocaron la reorganización de las rutas. 

Hoy, la ruta ha resurgido como un camino cultural y turístico. Sus connotaciones son las mismas que hacer el viaje del Camino de Santiago de Compostela desde Sarria, aunque verás que en este caso tendrás que caminar mucho más

 

La Ruta de la Lana en la Actualidad

Si, hoy es una vía de gran interés para peregrinos y turistas. Su rica historia y el atractivo de sus paisajes han llevado a diversas iniciativas para su revalorización y promoción. A continuación, exploraremos cómo se ha trabajado para conservar y promover esta ruta, y qué infraestructura y servicios se ofrecen actualmente a los peregrinos.

La revalorización ha sido posible gracias a múltiples iniciativas de conservación y promoción. Organizaciones locales y gobiernos regionales han colaborado en proyectos para restaurar y señalizar el camino, además de promover su historia y patrimonio.

La infraestructura para los peregrinos ha mejorado significativamente en los últimos años. A lo largo de la Ruta de la Lana, se han establecido numerosos alojamientos, desde albergues tradicionales hasta hoteles rurales, ofreciendo opciones para todos los presupuestos. 

La señalización del camino ha sido una prioridad en su revalorización. Señales claras y bien ubicadas guían a a lo largo del trayecto, asegurando que se pueda seguir el camino con facilidad y seguridad. Además, se han instalado paneles informativos que ofrecen detalles sobre la historia y la cultura de las áreas que atraviesa la ruta.

 

Itinerario de la Ruta de la Lana

A continuación, se presenta un itinerario detallado de las distintas etapas de la Ruta de la Lana partiendo desde Alicante (Se puede hacer desde Valencia, pero este punto de origen preferimos dejarlo para hablar del Camino de Levante). 

Recorrerás cerca de 700 kilómetros 6 provincias hasta llegar a Burgos, donde conectarás con el Camino Francés.

  • Etapa 1: Alicante-Orito – 23 km
  • Etapa 2: Orito-Petrer – 20 km
  • Etapa 3: Petrer-Villena – 21 km
  • Etapa 4: Villena-Caudete (ya en Albacete) – 15 km
  • Etapa 5: Caudete-Almansa – 26 km
  • Etapa 6: Almansa-Alpera – 22 km
  • Etapa 7: Alpera-Alatoz – 26 km
  • Etapa 8: Alatoz-Casas Ibáñez – 30 km
  • Etapa 9: Casas Ibáñez-Villarta (ya en Cuenca) – 27 km
  • Etapa 10: Villarta-Campillo de Altobuey – 30 km
  • Etapa 11: Campillo de Altobuey-Monteagudo de las Salinas – 31 km
  • Etapa 12: Monteagudo de las Salinas-Fuentes – 23 km
  • Etapa 13: Fuentes-Cuenca – 22 km
  • Etapa 14: Cuenca-Bascuñana de San Pedro – 24 km
  • Etapa 15: Bascuñana de San Pedro-Villaconejos de Trabaque – 27 km
  • Etapa 16: Villaconejos de Trabaque-Salmerón (ya en Guadalajara) – 28 km
  • Etapa 17: Salmerón-Viana de Mondéjar – 22 km
  • Etapa 18: Viana de Mondéjar- Cifuentes – 20 km
  • Etapa 19: Cifuentes-Mandayona – 26 km
  • Etapa 20: Mandayona-Atienza – 36 km
  • Etapa 21: Atienza-Retortillo de Soria (ya en Soria) – 22 km
  • Etapa 22: Retortillo de Soria-Fresno de Caracena – 24 km
  • Etapa 23: Fresno de Caracena-San Esteban de Gormaz – 19 km
  • Etapa 24: San Esteban de Gormaz-Quintanarraya (ya en Burgos) – 31 km
  • Etapa 25: Quintanarraya-Santo Domingo de Silos – 25 km
  • Etapa 26: Santo Domingo de Silos-Mecerreyes – 23km
  • Etapa 27: Mecerreyes- Burgos – 35 km

La Ruta de la Lana ofrece una variedad de paisajes que cambian a medida que avanza por estas provincias. A lo largo del camino, se atraviesan desde las llanuras y viñedos de Alicante hasta las ondulantes colinas y bosques de Castilla-La Mancha.

Los peregrinos disfrutarán de la tranquilidad de los campos manchegos, pasando por aldeas y pueblos históricos, muchos de los cuales mantienen la esencia de épocas pasadas. En comparación con el Camino del Norte, esta ruta es menos montañosa, ofreciendo una experiencia de caminata más relajada, aunque con distancias largas entre algunos puntos.

Igualmente, se distingue del Camino Portugués y del Camino de Santiago Portugués desde Tui al mantenerse lejos del mar, atravesando en cambio el corazón agrícola y ganadero de España. Los paisajes naturales, como el Parque Natural del Río Cabriel y el Cañón del Río Caracena, proporcionan vistas espectaculares y momentos de conexión con la naturaleza.